jueves, 9 de octubre de 2008

La Relactación de Sonia con Diego

Mi relactación

Me llamo Sonia, tengo 36 años y una hija de 5 años que se llama Zaira, este verano, después de estar mas de 3 años sin darle el pecho a mi hija, relacté para amamantar a mi sobrino.

Para entender mi historia de relactación, quizás deba explicaros que tengo una hermana gemela, Carmen, y que la unión que tenemos entre las dos es muy especial.

Cuando tuvimos a nuestras primeras hijas (Lucía y Zaira) siempre tuvimos claro que les ibamos a dar pecho, jamás dudamos de si ibamos a tener leche, de si las niñas iban a estar bien alimentadas, en parte gracias a la matrona que tuvo Carmen en el Centro de Salud de la Paz, se llama Luz y es una persona excelente, que apoya el parto natural, está a favor de la lactancia, colecho. Etc.

Como las niñas solo se llevan 8 meses les pudimos dar de mamar a las dos.

Zaira se destetó con 2 años, pero Lucia siguio con su teta hasta los 4 años y medio.

Cuando mi hermana dio a luz a Diego siempre se me quedó la espinita de darle de mamar al niño,pero no fue hasta que el niño tuvo 8 meses que tome la decisión (juntamente con mi gemela), que queria intentar amamantarlo, ya que el niño cuando yo lo cogía en brazos se me enganchaba y me busca la teta, asi que decidi intentarlo.

Despues de pedirle consejo a Alba (Asesora de Lactancia de Barcelona) y a las chicas de Lactaria en Zaragoza, decidi intentarlo, desde Lactaria me dejaron un sacaleches electrico y comence a ponermelo al pecho.

Me lo ponía cada tres horas mas o menos y al sexto día me empezo a salir leche del pecho derecho, y al día siguiente ya me salian bastantes gotitas de ese pecho y me empezo a salir tambien leche del izquierdo.

No tengo leche para amamantar a un regimiento, pero siempre que Diego me necesita aunque sea para dormirse me tiene ahí. Por supuesto mi hermana lo sigue amamantando, ahora tiene 13 meses.

Solo con recordar la cara con la que me mira Diego cuando me lo pongo al pecho y me sonríe, es una experiencia tan maravillosa que con eso me vale.

Gracias a mi gemela, por prestarme al niño, si no no hubiera sido posible, a mis niñas Zaira y Lucia que tanto me han animado y que me dicen que el calostro sabe a caramelo, a mi marido por aguantar el ruido del sacaleches a horas intempestivas y a una persona, casi desconocida para mi, que cuando se entero de que lo estaba intentando en vez de reprocharmelo como mis amigas me dijo: que bien!!!, te hara mucha ilusion!!!!!

4 comentarios:

Lorién dijo...

Gracias Sonia, con tu experiencia de relactación muchas personas deberian ver que eso de que "no hay leche" o "mi leche es mala" es un mito.

Tu experiencia sera de útilidad, estoy seguro.

oko dijo...

Estoy con Lorién, estoy segura de que servirá para dar un toque de normalidad a este tema tan reprobado.

Por cierto, me ha parecido precioso. Seguro que para tí ha sido una experiencia estupenda, pero no me puedo imaginar la satisfacción de ese pequeño con 4 tetis a su disposición. Debe ser parecido al paraíso, no?

Un saludo.

Anónimo dijo...

Gracias a ti Sergio, por publicar mi historia, para mi es una sensación maravillosa y aun me emociono cada vez que la releo.

Virginia dijo...

Ya lo habia leido....pero al poder dar la teta a Candela ahora me he releido tu historia.........ahora que Diego ha cumplido ya 2 años, y me parece maravilloso.
Os quiero Twins