sábado, 25 de junio de 2011

Trabajo y embarazo

Intentando devolver la esencia primera de este blog, tras el terremoto que ha provocado el caso Habiba (hoy felizmente reunidas aunque sin ser liberadas por los servicios sociales) voy a escribir sobre algo que considero también relacionado con el parto natural: el embarazo natural

Ayer alguien comentaba que una presentadora de telvisión embarazada iba a trabajar hasta el final, he encontrado la noticia. Me recordó mucho a mí misma. También pensé lo mismo e hice lo mismo.

Ahora, tras haber sufrido un adelanto de parto de dos semanas y tener un bebé de 2,500 kg. que casi menten en la incubadora ya no pienso como entonces.

No sé por qué razón algunas mujeres pensamos que el embarazo no debe afectar a nuestras vidas laborales. Que hay que seguir al 100% todo el embarazo.

Reconozco que había declaraciones que me escandalizaban "me pediré la baja dos meses antes y prepararé la habitación del niño". Pues no. La baja es una cosa muy seria y no son unas vacaciones a demanda.

Pero tampoco es cuestión de pensar que tenemos que estar igual que antes de quedarnos embarazadas. El embarazo es un esfuerzo físico muy grande. No en vano se trata de convertir un par de células en un ser humano de alrededor de 3 kilos. Con un sistema nervioso, vascular, gástrico, ...



No es lógico pensar que estamos "enfermas" por no rendir como antes. Estamos realizando un trabajo que nadie más puede hacer (dar el sustento necesario al feto para que se desarrolle), que afectará a nuestro hijo el resto de su vida (un parto prematuro, un elevado nivel de estrés, ... puede dejar marcas para siempre).

Por eso abogo por una mayor condescendencia con las limitaciones del cuerpo femenino durante la gestación.

Es cierto que aún vivimos en una sociedad machista en la que ciertos responsables que ven a una embarazada como una lacra, como una enferma, como una pieza defectuosa.

Y, el problema no es sólo de ellos, si no de todas las que se ven a ver afectadas por sus decisiones (ninguna mujer en edad fértil en cargos de responsabilidad, preferencia por la contratación masculina,...). Pero eso no se combate negando nuestro embarazo sino concienciándoles (algo realmente difícil) de la importancia de continuar la especie.

Que nazcan niños es básico para nuestra sociedad. Sólo quien trabaje cuando tengamos 67 años pagará nuestra jubilación. Pero este perfil de persona prefiere que el coste del embarazolo pague otro. Por eso, medidas en las que sea el estado quien reparta el coste entre todos, puede ayudar a euilibrar la balanza.

Creo que medidas como bajas parciales (posibilidad de trabajar sólo un 80% del horario), posibilidad de contratar antes de que comience la baja maternal a la persona que la sustituya, incentivos por tener contratadas a mujeres embarazadas,... harían más justo el reparto del apoyo de la sociedad. Algo vital para perpetuar la especie y que conseguiría que la presión machista sobre la falsa "debilidad" de las embarazadas se diluyera.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

mHola Estefanía, acabo de descubrir tu blog. Tengo treinta y tres años y estoy embaraza. Yo soy de esas mujeres que se sienten enfermas, débiles y vulnerables ante su embarazo. Pues sí. Me siento exortizada de mi cuerpo, era una mujer activa, dueña de sí misma... y ahora, no lo soy en absoluto.
Me fatigo, he cogido mucho peso, me mareo, me siento débil y fatal... lo siento mucho, pero es así y espero que me den la baja lo antes posible -tengo un trabajo que me va a permitir hacerlo a los 5-6 meses y me siento no sólo orgullosa sino afortunada: ójala todas las mujeres pudieran hacerlo.
Tanto mi bebé como yo estamos sanas pero no entiendo por qué algunas mujeres tratáis de "normalizar" algo que no lo es. Cada una de nosotras es un mundo y yo me encuentro fatal, qué voy a hacerle. Y sí, desde el mes que viene, me dedicaré a su habitación. _Pues sí.

Belissa dijo...

Buenos días a todas:
Hace 1 semana y media que di a luz a una preciosa niña.
Estuve trabajando hasta el viernes anterior a dar a luz, siendo que podia haber dejado de trabajar 2 semanas antes no lo supe hasta esa misma semana. El mismo dia que presentaba los papeles para tramitar la baja por suspension por riesgo, en la semana 39, empece a notar contracciones y en la madrugada nacio mi hija.
Una baja que duró 2 días, una baja que le va a suponer a la mutua de mi empresa una cantidad minima.

Por qué aguanté tanto tiempo, porque en dicho momento la unica de la familia que trabajaba era yo, porque di mas importancia a mi trabajo que a mi misma y por supuesto a mi hija.
Porque en ese momento y despues de un embarazo emocionalmente estresante por asuntos laborales y familiares, no pense que mi salud pesara más.

Ahora voy a tomarme la vida de manera relajada por el bien de mi hija y el mio propio.

ojala llegue el dia en que las mujeres no tengamos que sacrificar ciertas cosas.

Estefania dijo...

Anónimo,
no me he debido de explicar muy bien.
Precisamente lo que defiendo es lo que a tí te ocurre, una baja justificada.

En ese trozo de comentario sólo h
Hablaba de mujeres que se encuentran bien pero se cogen la baja "porque pueden". El resto del post hablaba de casos como el de Belissa, mujeres que anteponemos el trabajo al embarazo. Como si el embarazo fuera una enfermedad en lugar de ser nuestro trabajo más importante de nuestra vida.

Anónimo dijo...

La baja por riesgo en el embarazo no es una baja para la madre, como me he hartado de repetir durante mis 2 embarazos, en los que me encontraba pues uno esplendida, y otro hecha polvo, es para el bebé. Hay muy
pocos trabajos que no supongan un riesgo para el bebé, cada uno con sus circunstancias y a según que semanas, asi que lo de trabajr 80% igual es bueno para ti, pero no para el bebé, estoy convencida de que nos dan las bajas porque es mas barato que asumir una baja por riesgo del embarazo, que los costes economicos de tener un prematuro o un bebe con retraso del crecimiento. Cuando yo queria la baja por riesgo en mi segundo embarazo, y me toreaban por motivos economicos, yo me encontraba bien, pero sabia mi trabajo no era lo mejor para mi bebé, y lo peor era que mis compañeras tenian el orgullo de decir que casi habian ido del trabajo a parir hijos con retraso del crecimiento intrauterino

Estefania dijo...

Está claro que me he explicado fatal. No proponía esas medidas como alternativa a la baja sino como complementarias.

Una cosa es la baja por riesgo, otra por malestar de la madre y otra son otras medidas para madres que no pueden rendir al 100%, que es lo que propongo.

Estefania dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Estefania dijo...

Por cierto, a lo que me refería con "bajas para poner la habitación" se trata de dos casos, concretos, de mujeres que "simularon" encontrarse mal para pedir la baja y preparar "tranquilamente" la llegada del bebé.

Hablo sólo de esos abusos. No de los casos justificados. de hecho, para los justificados es para lo que propongo las otras medidas. Mujeres que sienten que no es que no puedan trabajar pero sí que la jornada completa es muy dura. Y, lamentablmente, en esos casos se suele inclinar la balanza a favor de seguir trabajando al 100%.