miércoles, 24 de febrero de 2010

Feminidad, masculinidad, roles e igualdad

Resulta extraño para mi comentar este genial post de Teo y Leo. Como hombre que frecuento "ambientes femeninos" (claro que pienso que no deberían ser exclusivamente femeninos).

Sin embargo estoy de acuerdo con Noemí (autora del post) en el tema de las ferias. Quizá mi opinión resulte algo extrema, pero echando la vista atrás:

  • Cuando empezó la medicalización del parto los hombres eran mayoría aplastante (incluso solo hombres) y las mujeres en la sanidad estaban de enfermeras, en una época en la que la enfermería se veía de forma bastante restrictiva. Para cuidar, pero no para opinar sobre la conveniencia de inmovilizar a la mujer y manipularla en sus partos. Razón por la que se ha convencido a las mujeres de que lo mejor es "dejarse hacer" en el parto (someterse al fin y al cabo).
  • Cuando empezó el boom de la industria lechera en relación a la lactancia artificial, solo eran hombres los que manejaban el cotarro. Razón por la que se ha convencido a las mujeres de que el biberón es mejor que su propio cuerpo.
  • Conforme las mujeres iban ganando en "derechos y oportunidades" iban teniendo que adquirir los paradigmas masculinos para ser aceptadas en un ambiente mayoritariamente masculino.
  • Hoy por hoy tenemos, asociado con el poder, mujeres que ejercen su profesión de esa forma masculina, y que sin percibirlo ejercen violencia hacia el resto de su sexo de una forma muy simple: Decidiendo por las demás lo que es apropiado o no para la mujer. Algo "tradicionalmente" masculino. Políticas, obstetras, incluso algunas matronas (lo que más me duele, porque sin ellas poco habríamos avanzado en todo esto), ....

Así que ahora tenemos mujeres ocupándose de temas "tradicionalmente" masculinos y hombres ocupándose de temas "tradicionalmente" femeninos. Lo cual está bien.... siempre y cuando no se quiera imponer una visión de lo que es adecuado a los demás.

Creo que estamos viviendo una etapa de reequilibrio:

Antes la lucha feminista (ahora todavía) consistía en demostrar que las mujeres son capaces de hacer lo mismo que los hombres y buscar ser "iguales" que ellos.

Ahora muchas mujeres ya lo saben, no necesitan demostrarlo, y cuando quieren trabajar, trabajan y cuando quieren criar, crían. Esa si es la autentica liberación de la mujer. Saber que son valiosas para la sociedad en cualquier circunstancia. Paradojicamente los obstáculos viene de la propia sociedad.

La mujer que todavía tiene la necesidad de encontrar su valía, ha de abordar todavía ese paso, para trascenderlo y llegar a su equilibrio personal. Muchas de esas mujeres todavía están sometidas a una dinámica machista intencionada pero, sobre todo, no intencionada, inercial, adquirida de tiempos pasados y que todavía tiene su eco.

En todo este proceso el hombre, a tenido que adaptarse a los cambios de roles. Se le ha solicitado sensibilidad, presencia, cambiar pañales, cuidar a los niños, ... y todo esto está muy bien.

Pero ha generado mucha confusión en hombres que en sus casas han vivido todavía la inercia machista (no intencionada pienso yo), y que todavía conservan (conservamos) de forma residual la costumbre de lo que hemos vivido de niños. Es un proceso largo.

Algunos hombres empiezan a adaptarse y no supone ningún problema adoptar roles "tradicionalmente" femeninos. Pero claro en estos temas que comenta Noemí su relación con la maternidad es mínima, inclusos nula. Paradojas. Adoptan posiciones masculinas en temas femeninos.

También los hombres necesitan alcanzar un re-equilibrio, y están encontrando su utilidad en temas tradicionalmente femeninos, el cuidado de los hijos, de la casa,..., y esto esta bien (ya era hora). Y además somos capaces. Muchos necesitamos que nos deis cancha, pues queremos hacer estas cosas, pero en el ambiente en el que hemos crecido no era habitual y la inercia esta allí.

En ocasiones (hablo ahora en defensa de los hombres) he visto como se les exigía cambiar pañales, cuidar de los niños, etc y lo hacían razonablemente bien, pero a pesar de ello se les recriminaba no hacerlo TAN BIEN como lo haría su pareja. La inercia también esta presente en las mujeres, reclaman que los hombres hagan cosas, pero tienen el impulso de hacerlo ellas porque sienten que lo harán mejor (yo creo que quizá distinto, pero ni mejor ni peor)

Se necesita tiempo, menos exigencia y más solicitar ayuda, más paciencia, menos reproche, y los residuos de ambientes no equilibrados irán desapareciendo, y el tener la oportunidad de contribuir, sin ser "machacados", ira dando paso a las cosas bien hechas. Hace falta práctica.

La mujer también sufrió (y sigue sufriendo) exigencia, reproches, recriminaciones por no hacerlo tan bien como un hombre (quizá todavía no le habían dado suficiente "cancha" para demostrar que si). Quiero creer que mayoritariamente eso no se da ya. Y me gustaría que al hombre le pasara lo mismo en terreno tradicionalmente femenino.

Pero volviendo al tema, vosotras, lectoras, y más concretamente Noemi y Eva(ya que comentando vuestro post), pertenecéis a la nueva generación de mujeres seguras de si mismas que ya no necesitan demostrar que son tan buenas como los hombres en cualquier cosa. Ya lo sabéis. Estáis en la siguiente fase.

Recuperar un espacio en el que captáis la importancia de que las mujeres sean las protagonistas, sin, por ello, tener que adoptar una posición sexista.

Por lo tanto, Noemí, acabáis escribiendo artículos como este, tan interesantes.

Hombres si, pero, ojo, hay temas en los que quien debe de marcar la pauta, por razones evidentes, es la mujer.

Hombres ejerciendo un poder tipicamente masculino (convencer, vender), con el que se sienten cómodos, sobre temas tipicamente femeninos, lactancia materna, etc, pero sin la adecuada formación o conocimiento, y claramente sin la experiencia de una mujer en estos temas (¡todavía no he podido dar pecho!).

Así que ¡recomiendan cremas para grietas! - ! clara desinformación - ¡ Y en cuanto a los sacaleches, si alguna vez me veis recomendar alguno, sera porque lo haya leido en Teo y Leo, o en otra web de mujeres lactantes.

Porque aunque soy un gran teórico, de momento... ¡no he probado siquiera a extraerme leche!, de hecho la copa del sacaleches debe estar diseñada mál, porque no he conseguido que se adapte a mi pecho.

Eso si, cambio pañales, muchos pañales ....

2 comentarios:

NOEMI dijo...

Pues si..eres de los hombres que menciono que saben de lo que hablan en temas relacionados con la crianza.
Es muy curioso lo de la igualdad entre los generos, yo a pesar de que os tireis a mi cuello, opino que no somos iguales y gracias a Dios.
Creo que geneticamente somos diferentes y eso hace más rica la convivencia y más atractivo a la pareja.
Menudo aburrimiento si fueramos iguales.Además es muy interesante ver el mismo problema desde otro punto de vista.
Lo que si que creo es que nos dejamos llevar demsaiado por los roles establecidos en la sociedad, y ahí es donde vemos tantas diferencias..menudo rollo, da para otro post!!

Lorién dijo...

No he entendido lo de "a pesar de que os tiréis a mi cuello, opino que no somos iguales y gracias a Dios." básicamente porque opino como tu; somos distintos y en el respeto a la diferencia radica la clave para la "igualdad".

Y ciertamente, menos mal que somos distintos.

Un abrazo